Aumento de precios y cambios en la dieta: ¿por qué se consume menos carne vacuna?
“Bajó el consumo de carne, subieron las exportaciones”, señaló Miguel Schiariti, el presidente de la Cámara e Industria del Comercio de Carnes, en diálogo con Velocidad Argentina. Compartió que la disminución es en el tipo vacuno, ya que el pollo y el cerdo mantienen sus valores de consumo.

Durante los últimos años se registraron bajas en el consumo de carne a nivel mundial y, si bien en muchos casos tiene que ver con cambios en las dietas y elecciones alimenticias, a nivel regional está principalmente ligado al aumento del precio de este producto.
Para interiorizarse en este fenómeno, Velocidad Argentina conversó con Miguel Schiariti, presidente de la Cámara e Industria del Comercio de Carnes. El representante aclaró, en primer lugar, que lo que se redujo en nuestro país es el consumo de carne vacuna, ya que “si se tienen en cuenta la carne de cerdo y el pollo, el dato de la disminución no es así”.
Esta diferencia entre los tipos de carne, explicó el referente, radica principalmente en dos factores. Por un lado, económico, ya que el costo de producción de la carne vacuna es más elevado que el pollo o el cerdo, lo que encarece el valor final del producto; y, por otro lado, un factor cultural: “las personas se están acostumbrados en los últimos años a comer carne de pollo en todos los niveles socioeconómicos y todos los días de la semana. Además, el pollo es más fácil de cocinar en un departamento que un churrasco”.
Schiariti se refirió también a la balanza comercial ya que, si bien “bajó el consumo de carne, subieron las exportaciones”. El referente explicó que “entre el 20 y el 30% de lo producido, se exporta” y que nuestro principal comprador actualmente es China.
Con esta afirmación desmintió la creencia de que vendemos la mayor cantidad de la carne del país, y afirmó también que son los mejores ejemplares los que se consumen en el mercado local. Compartió también que, a nivel regional, uno de los principales exportadores actualmente es Brasil.
Por último, contrastó la situación del sector agropecuario que, según Schiariti, fue beneficiado con la liberación de las exportaciones y la baja de las retenciones, “tal como había prometido el gobierno”, con la actualidad del sector industrial. Desarrolló que hay suspensiones y terminación de contratos: “La industria frigorífica está muy complicada”.
